Molinero Revista Año: 3 Número: 13 Mayo-Junio 2021
65 ARTÍCULO MOLINERO-MILLER / Mayo - Junıo 2021 ción con multiple dirección. Especialmente en las zonas en que no son accesibles el alimento suplementado y en las zonas que son caros estos alimentos. Especialmente, Por ejemplo, aunque los alimentos básicos como el arroz constituyen una parte importante de la dieta mundial, muchos nutrientes que se encuentran naturalmente en estos productos se pierden durante el procesamiento del arroz. Mientras tanto, la vitamina D es sintetizada princi- palmente por los rayos ultravioleta. Hay pocos alimentos que contengan vitamina D de forma natural. En todo el mundo, la insuficiencia o deficiencia de vitamina D se midió como 88% y 37%, respectivamente. La nutrición tiene el poder de mejorar la salud inmuno- lógica en todo el mundo, pero ¿cómo pueden los sectores público y privado garantizar que todas las personas, in- cluidas las más vulnerables, tengan acceso a la nutrición que necesitan para mantenerse saludables y prosperar? ¿Y cómo se puede lograr esto de una manera segura, eficiente y asequible? Las ventajas de enriquecimiento (fortificación) de alimentación de gran cantidad Se ha demostrado que los programas de fortificación de alimentos son una de las formas más exitosas y renta- bles de mejorar la ingesta nutricional de grandes grupos de población en todo el mundo, y estas iniciativas tam- bién pueden ayudar a acelerar el progreso hacia el logro de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU 2 (Hambre Cero) y 3 (Salud y Bienestar). La OMS recomienda fortificar el arroz como una estrategia de sa- lud pública con una variedad de micronutrientes, que in- cluyen hierro, ácido fólico y vitamina A, y actualmente es obligatorio fortificar el arroz en una variedad de países, incluidos Costa Rica, Nicaragua, Panamá, Papua Nueva Guinea, las Islas Salomón, Filipinas y partes de los EE. UU. Algunos países, como India y Perú, también han in- troducido, o están en proceso de lanzar, estándares para la fortificación del arroz. Los programas de nutrición escolar son uno de los bue- nos ejemplos de intervención en los procesos de nutri- ción. Millones de estudiantes en todo el mundo padecen una deficiencia crónica de los nutrientes que necesitan para su desarrollo físico y cognitivo. Según las estimaciones del Programa Mundial de Ali- mentos, alrededor de 305 millones de estudiantes de países de ingresos bajos y medianos se benefician de los programas de nutrición en la escuela. Pero hay 73 millo- nes de niños que viven en la pobreza extrema y no tienen acceso a los programas de nutrición escolar en 60 países. Se estima que la cantidad de niños desnutridos puede ha- ber aumentado en todo el mundo debido al cierre de las escuelas debido a la pandemia de COVID-19. En nombre de la inversión en las generaciones futuras, las iniciativas de nutrición escolar apoyan el sistema inmunológico, el estado de salud y el desarrollo cognitivo y físico de los niños con alimentos enriquecidos con muchos micronu- trientes. Por ejemplo, en una escuela de China, las tasas de anemia se redujeron al darles a los estudiantes co- midas enriquecidas con hierro y zinc, y vitaminas A, B1 y B2. Un estudio realizado en una escuela en Camboya mostró que el arroz enriquecido con muchos micronu-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy NTMxMzIx